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Tres hombres, de apellidos Alanís Dávila, Méndez Contreras y Arrieta Reyes son los funcionarios de la Refinería Costarricense de Petróleo (Recope), que fueron detenidos la semana pasada al figurar como sospechosos de colaborar con bandas criminales dedicadas a robar combustible y lucrar con este crimen, entre ellas, la presuntamente dirigida por el empresario Gilbert Bell Fernández, alias Macho Coca.
Ellos junto a un trabajador del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) apellido Bloofield, deberán descontar 6 meses de prisión preventiva, según confirmó la Fiscalía Adjunta contra el Narcotráfico y Delitos Conexos.
Los 3 funcionarios de Recope acumulan 37 años de años sumados de trabajar en la empresa pública, que cerca de ₡1.2 millones en sus remuneraciones, de acuerdo con datos consultados por crhoy.com.
Méndez Contreras es el más longevo de laborar para la Refinadora: ingresó el 13 de agosto del 2008 y tiene más de 16 años. Tiene propiedad en el puesto de técnico en procesos, en el Departamento de Operaciones Portuarias de la terminal Moín.
Por ende es el que más gana de los tres sospechosos, con un salario base de ₡442.610, más otros porcentajes por complementos salariales.
Arrieta Reyes está por cumplir 14 años en Recope: ingresó el 3 de enero del 2011 y ocupa una plaza en propiedad en el puesto de operario de procesos 2, en el Departamento de Operaciones Portuarias de la terminal Moín.
Esta categoría laboral tiene una base salarial de ₡417.610, más los beneficios y complementos que representa trabajar en la institución.
Por su parte Alanis Dávila: recién cumplió 8 años de trayectoria en la empresa, dado que labora allí desde el 26 de octubre del 2016. Cuenta con una plaza en propiedad en el puesto de auxiliar de obras del Departamento de Mantenimiento Regional Caribe en la terminal Moín.
Recientemente participó en un concurso interno para pasar al Departamento Distribución Central Pacífico. Su sueldo como auxiliar es de ₡316.414 como base, más complementos.
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El martes 10 de diciembre, Recope, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y el Ministerio Público ejecutaron un megaoperativo con 93 allanamientos en Turrialba, Siquirres, Guápiles, Sarapiquí, Alajuelita, Alajuela y Limón, con el fin de desmantelar a varias organizaciones criminales responsables por unos ₡5.700 millones en perjuicio por robo de combustibles.
Se trató de dos casos simultáneos llamados Desconexión y Huachicoleros: en este último figura Gilbert Bell Fernández, alias Macho Coca, como uno de los líderes del grupo.
“Durante la línea de investigación, se pudo determinar que en apariencia esta actividad ilícita estaba siendo realizada en subgrupos y lideradas aparentemente por un sujeto de apellido Bell, otro de apellido Soto y un tercer masculino de apellido Salas”, confirmó el OIJ.
“Macho Coca” fue detenido desde octubre pasado como parte de otra investigación denominada “PetroCoke”, por el cual se le había impuesto 3 meses de prisión preventiva, de los cuales tenía uno pendiente por descontar.
No obstante, la Fiscalía contra Narcotráfico consiguió la imposición de 6 meses más, por lo cual la estancia del empresario tras las rejas se extendió 5 meses.
“Estamos revisando el expediente, es muy grande, entonces por el fondo no podría hacer un análisis, solo que es una investigación por robo de combustible y como él ya estaba detenido se mantiene en esa condición como imputado.
Don Gilbert está tranquilo, siempre reacciona fuerte y tranquilo, además es una persona muy inteligente, estamos analizando los nuevos hechos para conocer los indicios que se tienen contra él”, Manrique González, abogado.
Otro sujeto apellido Camacho Pemberton descontará un semestre de prisión preventiva.
A otros imputados de apellidos Ortega, Obando Arroyo, Trigueros Vega, Córdoba Cascante, Molina Sandí y Castellón Treminio, se impusieron las restricciones de presentarse a firmas de manera periódica, mantener domicilio fijo e impedimento de salida del país.
Esta causa se tramita bajo el expediente 23-008666-042-PE. Por su parte, en el otro caso bajo el expediente 23-000268-067-PE que corresponde al robo de hidrocarburos en Turrialba, todavía no se han determinado las medidas cautelares.
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El Caso Huachicoleros culminó con la ejecución de 55 allanamientos en diferentes partes del país para detener a 18 personas vinculadas con las tres organizaciones.
Randall Zúñiga, director del OIJ, confirmó que Bell es uno de los líderes de los clanes a los que la policía atacó. Los otros eran liderados por alias Gordillo y alias Mafia, con este último Macho Coca tenía relación directa en sus negocios.
“En Limón se están desarticulando 3 grupos criminales, el primero liderado por un sujeto conocido con el alias de Macho Coca, de apellido Bell Fernández, quien en apariencia sustraía combustible para posteriormente venderlo o usarlo en embarcaciones propias”, confirmó el jefe policial.
“Gordillo”, de apellido Soto, es dueño de varias gasolineras en Sarapiquí y Poás de Alajuela y en apariencia recibía el producto robado para comercializarlo de forma ilegal en sus negocios.
Al parecer para disimular el traslado de combustible robado, llenaba un camión cisterna para trasladarlo, pero solo uno de los compartimentos llevaba gasolina comprada legítimamente y de esa tenía todos los registros y facturas, pero los otros tres compartimentos llevaban material sustraído a Recope.
Por su parte, alias Mafia, de apellido Salas tenía sus negocios en Guápiles y eran quien presuntamente se dedicaba a lavar dinero producto de las ganancias que le quedaban a las organizaciones que robaban hidrocarburos.
Por eso, el OIJ le abrió un proceso por legitimación de capitales, delito que en apariencia cometía con negocios como ventas de ropa, ventas de trámite rápido y bodegas.
Source
José Adelio Murillo
